Estas fiestas de fin de año entre la firma del 4º ERE, la reunión "secreta" con el presidente de los secretarios generales de los 3 sindicatos donde se informó de un "nuevo recorte de empleo" (indirectos), los remos, la reducción de la gama de producto, etc., la empresa tuvo tiempo de organizar una cenita cena con sus mejores colaboradores en Can Amat para desparramar su ideología empresarial y prmiar con 4 canapes, 2 banderitas y algunas camisetas... Mientras tanto, sin convenio, con EREs, y el anuncio de más despidos. Todo un derroche de filosofía empresarial. Pongamos las barbas en remojo y mantengamos la pólvora seca....
LA GRAN CENA
Curiosamente el día 19 de diciembre, primer día que empezaba las vacaciones de navidad para la mayoría de currantes de esta empresa o mejor dicho fin de semana anterior a que empezáramos el ultimo ERE del año, nuestra querida empresa organizaba una cena para los mejores colaboradores como nos suele llamar esta empresa a los currante y los invitaba a ellos y a sus respectivas parejas a una cena en el Restaurante Paradise Can Amat de Martorell, pero como ya he dicho antes, era solo para los mejores grupos del año, los demás por lo que se ve no merecen ni agua.
Pues como dijo Jack el destripador “vamos por partes”.
La primera parte del acto consistía en ir a la fabrica a las 18:30 h para hacer una magnifica visita en la cual, como ponía la carta de invitación, tendrías la posibilidad de enseñar a tu pareja donde trabajas “nada más reconfortante en esta vida que enseñarle a tu pareja como metes chapas a un robot o como lijas o como aprietas tornillos”, a más de algun@ a lo mejor hasta se le saltarían las lágrimas de emoción al verlo.
Acto seguido una charla para comerte el coco de lo bien que lo tienen que seguir haciendo si no ya no habrá más cenas.
Y por fin llegamos al momento que todos estábamos esperando, la gran cena. ¡El gran papeo que nos tienen preparado!
Pues bien, llegamos al salón Celler del restaurante Can Amat en el cual había 16 mesas preparadas para 10 comensales cada una donde nos dicen que nos distribuyamos como queramos excepto en una mesa que estaba reservada para Jefatura.
Llegan los aperitivos que consistían en una croqueta, un boquerón recostado en una mini tostada por persona, una banderilla de salmón con naranja y un trocito de morcilla de arroz también por persona, el que tuviera la suerte que a su acompañante no le gustara algo podía repetir.
La comida consistía en un primer plato de una pequeña ensalada con cuatro gambas, de segundo un trozo de ternasco inundado en salsa y de postre un trocito de helado, eso sí, entre dos tostaditas y para finalizar el café.
Mientras se repartían por las mesas unos pequeños platos con barquillos y trocitos de turrón de chocolate y avellanas empezaron a repartir una camiseta por persona de promoción del nuevo Seat Ibiza, amenizado por otro discursito de la jefatura, con guion preparado por si se le olvidaba algo porque lo que leía era difícil de recordar hasta para él, donde venía a decir que lo importante es que trabajemos mucho y bien sin preocuparnos por el dinero que lo importante son los objetivos de la vida.
Y lo bueno de esto es que te lo dice un tío que gana tres veces más que un currante normal, eso sí, al final del discurso nos dijo que habría una hora de barra libre, que eso viene a ser más o menos como decirte “cuanto eres capaz de chupar en una hora”.
La fiesta continuó con un maravilloso sorteo en el que repartían unos números y que los dos afortunados tendrían un premio extra , pues bien el segundo premio era dos camisetas de las que habían repartido anteriormente y el primero era una bolsa de viaje también de promoción, luego ya para finalizar, con todo ese alarde de derroche la empresa, dijo que había invitado esa noche a tres personas que no eran de ninguno de los grupos ganadores pero que igualmente se lo merecían por tener el gran merito de llevar 30 años en la empresa y no coger ni una sola baja, que por eso se merecían igualmente ser premiadas con algún regalo, pues bien, el gran regalo de la empresa a estas personas era ni más ni menos que tres camisetas “manda huevos”.
Así que ya sabéis, id al trabajo con fiebre o con las muñecas hechas polvos o lo que sea y al cabo de treinta años estaréis premiados con tres camisetas.
Y empezó el baile con la hora de barra libre que por los resultados que se vieron al final, sobre todo en el personaje que dió el discurso, causó estragos en la coordinación de movimientos.
En resumen, se puede considerar de ridícula la forma de premiar a los trabajadores por parte de la empresa, ya que estamos hablando que SEAT vende una imagen que no se corresponde con la forma de tratar a su plantilla, y más cuando días antes acababa de conseguir un ERE por un año más por parte de la administración.
Y ya sabes compañero, si estás leyendo esto es que eres la resistencia.
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